¿Quién puede querer hacerme daño? Vuelve a mí un pasado sombrío de penas y amarguras, viviendo en soledad, alejada de todo lo que era vida. Pero en ese pasado siempre estaba ella, como pilar en mi vida, como sustento y apoyo. Nunca caería porque ella estaba ahí, nunca perecería, nunca moriría, en el fondo.
Ahora que ya se ha ido me siento un poco sola y desvalida. Es en estos momentos que recuerdo su calidez y ternura, su sonrisa y su voz, ahora tan lejana a mí...
Quisiera decirle que venga a rescatarme, que no me abandone en mi soledad, que no me permita caer en el abismo nuevamente, que me levante si es que perezco y me transforme en cenizas... ¿Te volveré a encontrar alguna vez mamá?
pd: siempre existe la esperanza
lunes, 27 de octubre de 2008
jueves, 16 de octubre de 2008
sábado, 11 de octubre de 2008
Decepción
Yo que siempre he tratado de ser comprensiva, cuando necesito que me comprendan me dan la espalda. Yo que siempre he tratado de estar cuando me necesitan, cuando quiero mi espacio, me dan la espalda. Qué injusticia más grande. Qué decepción. De qué sirvió entregar tanto. De qué sirvió estar siempre con la mejor disposición. Simplemente, a la hora de agradecer, todos se olvidan.
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